Hombre de 75 años con atrofia muscular severa

CASO CLÍNICO REAL

Datos del paciente

  • Sexo: Hombre
  • Edad: 75 años
  • Diagnóstico: De forma crónica y progresiva presenta un cuadro de dolor en la cara anterior del muslo derecho y región inguinal derecha, de predominio nocturno y de características neuropáticas. El dolor se agrava con la micción en bipedestación. (Ver apartado «Introducción» a continuación).
  • Objetivo: Comprobar la utilidad y el grado de efectividad de la Potenciación Muscular Selectiva PMS® en el tratamiento de atrofias musculares de origen neurológico.
  • Tratamiento: Procedemos a realizar un programa de PMS® asociado a un programa de entrenamiento propioceptivo con el sistema SRT-ZeptoringPlusNoise®. (Ver apartado «Tratamiento» a continuación).
  • Comparativa de la fuerza: Realizamos una medición de la fuerza isométrica del cuádriceps del miembro inferior derecho (MID) y del miembro inferior izquierdo (MII) comparando el par máximo así como la capacidad de reclutamiento. En términos porcentuales, el cuádriceps del MID tenía un 22% menos de fuerza que el MII.

Duración

20 sesiones

Incremento de fuerza del cuádriceps

47%

Conclusión

En este caso, la PMS® ha sido útil en el tratamiento de una atrofia muscular de origen neurológico, tanto a nivel de fuerza como de mejoría de estado clínico.

Introducción

Paciente de 75 años que de forma crónica y progresiva presenta un cuadro de dolor en la cara anterior del muslo derecho y región inguinal derecha, de predominio nocturno y de características neuropáticas. El dolor se agrava con la micción en bipedestación.

Como antecedente osteoarticular, el paciente está intervenido en el año 1995 de prótesis de cadera derecha correctamente implantada.

A la exploración, presenta una hipoestesia en la cara anterior del muslo, con atrofia muscular severa a nivel de cuádriceps, con hiperreflexia del cuádriceps derecho, siendo normales el reflejo contralateral y los aquíleos bilaterales.

La electromiografía demuestra que el paciente presenta una polineuropatía sensitivo motora de tipo axonal, crónica, acusada en miembros inferiores (mmii) y leve en miembro superior derecho (MSD), sobre la que se superponen signos neurofisiológicos de afectación aguda y severa de los nervios femoral y obturador derechos.

Para descartar patología compresiva, se realiza una resonancia magnética (RMN) lumbar y cervical, en la que aparecen cambios degenerativos múltiples sin aparente afectación medular ni radicular.

Se realizaron estudios analíticos sin llegar a ningún diagnóstico etiológico. Por tanto, hablamos de una polineuropatía sensitivo motora crónica de origen idiopático.

El paciente fue tratado con dosis altas de pregabalina (lyrica 300) con una buena respuesta terapéutica, disminuyendo el dolor de una forma casi absoluta. La atrofia muscular, en cambio, tuvo una mejoría más limitada.

Anamnesis y exploración

  • El paciente acude a Medical Exercise ocho meses después del suceso. Su objetivo es mejorar sus condiciones físicas.
  • Debido a la debilidad del MID ha dejado de realizar casi cualquier actividad física.
  • Presenta debilidad generalizada con molestias ocasionales de mayor o menor intensidad a nivel de hombros, columna cervical, dorsal y lumbar.
  • Presenta rigidez matutina con sensación de cansancio extremo que mejora a lo largo del día.
  • A la exploración presenta signos de debilidad a nivel de cuádriceps de la pierna derecha, tanto a nivel de fuerza como de volumen.

Realizamos una medición funcional de la fuerza isométrica de los cuádriceps del MID y del MII.

Para ello, utilizamos la máquina M3 – Multi Muscule Machine (M3) de la marca alemana Schnell. Con ella, obtenemos un gráfico de fuerza que refleja, por un lado, el par máximo en la unidad Newtons/metro y, por otro lado, la pendiente que muestra la capacidad de reclutamiento de fibras musculares.

En la gráfica 1, se puede observar la diferencia significativa entre la fuerza del cuádriceps del MID (línea verde) con respecto al del MII (línea roja).

En términos porcentuales, el cuádriceps del MID tenía un 22% menos de fuerza que el MII. (Gráfica 2).

Tratamiento

Pautamos un programa de entrenamiento compuesto por:

  1. SRT-ZeptoringPlusNoise®: 10 sesiones de tratamiento proprioceptivo individualizado con un fisioterapeuta, por medio de resonancia estocástica, con frecuencia de dos sesiones semanales.
  2. Potenciación Muscular Selectiva – PMS® específica de cuádriceps: Entrenamiento dinámico, concéntrico y excéntrico del cuádriceps. Realizamos tres series de 30 repeticiones cada una con un intervalo de descanso no superior de 30 segundos entre cada serie. La resistencia inicial se calcula con el 20% sobre el par máximo alcanzado en la medición inicial. El objetivo de la sesión es llegar al fallo muscular, es decir, a la fatiga muscular. Si no se consigue el objetivo durante las tres series de trabajo, en la siguiente sesión se incrementa la resistencia entre un 5 y un 10%. Se realizaron 20 sesiones con frecuencia de dos sesiones semanales.
  3. Potenciación Muscular Selectiva – PMS® de la musculatura complementaria: Programa de entrenamiento concéntrico y excéntrico, con ejercicios de resistencia progresiva variable, orientado al fortalecimiento de la musculatura aductora, abductora, extensora de cadera, abdominal, paravertebral y miembro superior.

Tras la finalización del protocolo de entrenamiento específico, realizamos otra medición de la fuerza isométrica del cuádriceps observando un aumento de la fuerza con respecto a la medición inicial.

En la gráfica 3, podemos observar un incremento significativo de la fuerza isométrica del cuádriceps después del tratamiento (línea verde) con respecto a la fuerza isométrica del cuádriceps antes del tratamiento (línea roja).

También se puede ver que la pendiente de crecimiento de la línea verde es mayor que la de la línea roja. Esto se debe a una mayor capacidad de reclutamiento muscular del cuádriceps después del tratamiento.

En términos porcentuales, el cuádriceps del MID ha ganado un 47% de fuerza con respecto al inicio del tratamiento. (Gráfica 4).

Clínicamente, el paciente ha mejorado con mayor estabilidad y seguridad al caminar. Es capaz de aguantar más tiempo de una forma más confortable.

Tiene una vida más activa, habiéndose reducido también los dolores y molestias osteoarticulares que tenía en un principio.

Aconsejamos al paciente que continúe con el programa de PMS® de mantenimiento de la musculatura del cuádriceps y accesoria, con el fin de conservar la mejoría lograda durante el tratamiento, cosa que está haciendo en la actualidad.

Conclusión

La PMS® ha sido útil en este paciente con una atrofia de origen neurológico con unos resultados similares a los obtenidos por nosotros en atrofias de cuádriceps de origen mecánico.

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